15/04/2019

Lily Christensen, Gerente principal de colaboraciones, Viajes

Me siento orgullosa de mi sentido de la orientación. Mis amigos me llaman LPS (Lily Positioning System) porque parezco su sistema de posicionamiento personal cuando seguimos direcciones a un sitio nuevo. Pero en una ocasión, cuando tenía una reunión importante en la sede de la CNN en Nueva York, en el número 25 de Columbus Circle, me falló mi LPS.

Calculé mi hora de salida hacia la reunión estimando que llegaría 10 minutos antes de tiempo, pero el metro de Nueva York me escupió en Columbus Circle y me dirigí a la entrada equivocada. Tardé al menos 15 minutos en encontrar la entrada correcta, por lo que terminé llegando 10 minutos tarde a una reunión en una sala de ambiente descontento, llena de gente muy importante con muy poco tiempo disponible. Descarté caerles bien y puse toda la esperanza en que mi encanto borrara la vergüenza del retardo.

Escribir CNN en Google Maps creó mucha confusión

Incluso en una ciudad famosa por la estructura en forma de cuadrícula de sus calles, las direcciones postales y los marcadores no son suficiente.

En un reciente estudio sobre viajes de what3words, el 65 % de los encuestados declaró que habían tenido problemas para encontrar el lugar de una reunión, así que resulta que no estoy sola. Cuando les preguntas sobre su habilidad para orientarse cuando van de vacaciones, las estadísticas empeoran aún más. Un increíble 72 % declaró haberse perdido en un viaje de ocio, y más de la mitad tardaron más de una hora en encontrar su destino.

La mayor parte de estos problemas vienen dados por direcciones postales vagas y marcadores que nunca señalan la entrada para peatones. No, me da igual que el marcador esté perfectamente centrado en el medio de un edificio o estadio, lo que quiero saber es dónde está la entrada para personas.

¿Hay alguna alternativa? No es ningún secreto que what3words ha estado ganando fuerza como nueva forma de indicar lugares. Es un sistema que ha dividido el mundo en una cuadrícula compuesta de cuadrados de 3 x 3 m, y ha asignado una dirección de 3 palabras única a cada uno de ellos (hasta ahora en 27 idiomas). Por eso puedo decirte con confianza que la entrada al edificio de la CNN, en el número 25 de Columbus Circle (que no se encuentra, por cierto, en Columbus Circle), está en ///etanol.cargada.ubicado


Las direcciones postales pueden ser un trabalenguas

¿Qué tal tu chino? ¿Hablas bien neerlandés? ¿Es muy fácil pronunciar el ruso? Si tu respuesta es sí a las tres preguntas, eres una maravilla de la humanidad, pero la realidad es que la mayor parte de nosotros no habla más de un par de idiomas como mucho, y por lo tanto no sabemos deletrear (y mucho menos pronunciar) direcciones postales. Esto significa que, al intentar identificar en qué punto de nuestra ruta hemos girado hacia donde no era, puede suponer un reto pedir indicaciones o escribir nombres de lugares correctamente.

También limita nuestra habilidad de compartir lugares que nos encantan o dar mejor información sobre un destino, ya que dependemos de lo bien que sepamos interpretar direcciones extranjeras que seguramente no señalen la ubicación en la que está la puerta. Al utilizar solo 3 palabras, el mundo pasa a ser mucho más fácil de compartir. De hecho, 4 de cada 5 encuestados afirmó que habría muchas más probabilidades de que compartiera ubicaciones específicas y recomendaciones si contara con una forma más sencilla de hacerlo.

(Coreano, griego, ucraniano y neerlandés… preparados, listos, ¡traducir! (fuente: Google Images)

El problema de los marcadores

En los últimos 10 años, hemos pasado de depender exclusivamente de las direcciones postales a centrarnos más en buscar puntos de interés o topónimos en aplicaciones como Google Maps. He aquí el problema de los marcadores.

En Google Maps, los marcadores pueden situarse en cualquier punto de un edificio, en un lugar más o menos cercano a donde necesita ir la gente. Por eso la mayor parte de nosotros no confía en los marcadores. Nos dirigimos aproximadamente a donde queremos ir, y después confiamos en nuestras fieles viejas señales y letreros para hacer el resto. Sin embargo, debido al aumento de las estancias en alojamientos privados en lugar de los tradicionales hoteles, los letreros ya no son una opción y los anfitriones no tienen ningún control sobre los marcadores. Como era de esperarse, la principal razón por la que la gente se pierde es una entrada oculta (CNN, sabes de quién hablo).

Si en 2019 todavía utilizamos algo tan analógico como la señalización física, y no podemos confiar en los marcadores para que nos lleven a la puerta de entrada, no es de sorprender que un 71 % de la gente sienta frustración al perderse, ya que dar vueltas en círculos puede generar discusiones, que se pierdan importantes horas de salida, y lo que es peor, crear una sensación de inseguridad.

Gracias a colaboraciones con empresas como Airbnb , Lonely Planet , Kempinski hotels e Interpid Travel, está cambiando nuestra forma de indicar lugares, y what3words está resolviendo un problema que lleva sin solución más de dos siglos (las direcciones se inventaron en París, ¿a que no lo sabías?). La causa de la mayor parte de los errores al intentar encontrar un lugar es la mala información y recursos, pero ahora que tenemos una alternativa precisa y fácil de utilizar, esperemos que la próxima vez que te pierdas sea a propósito.

Este Airbnb era bastante difícil de encontrar, así que en lugar de seguir el párrafo de indicaciones que me ofrecieron, les pedí que me enviaran una dirección de 3 palabras.

Para garantizar que los viajeros siempre te encuentren a la primera, facilítales una dirección de 3 palabras. Descubre la tuya en what3words.com o descarga la aplicación gratuita para iOS o Android .